Mi trazo del otoño siempre será un tapiz de sosiego, de espera. Por muchos años que pasen, hay recordaciones que lejos de ensombrecerse, resplandecen como poderosas iluminarias de faros en la lontananza. Tiempo de breve quietud, de equilibrio. Los árboles están dispuestos para eliminar las hojas que servirán de abono, los animales preparan sus vestiduras, y sus despensas para el invierno. Es pues, tiempo de eliminar lo innecesario, época de evolución y de hacer balance, de dar preferencia a lo esencial y, si fuera posible, tomar algún apunte de las muchas lecciones que nos va entregando la vida. En el otoño se citan la luz y la oscuridad, preparémonos para mirar de frente la parte más sombría, no vaya ser cosa que nos domine el desanimo, la depresión.
Mi trazo de otoño es un rúnico forjado en un [Alto], donde se esperaban con esperanza las aguas otoñales, donde los fulgores de los faros de [Peñas], [S. Antonio] y [Torres] se unían en una admirable danza de luz.
Charlando de luz; ya nada nos sorprende, me confundí ligeramente al atender las noticias, parezco nuevo. Parece ser que tenemos un poco de problema con las constantes que creíamos fundamentales en nuestro Universo. Los científicos del [CERN] han anunciado la presencia de unos bichinos que corren que se las pelan, hasta tal punto llega la intrepidez, que el experimento pone en tela de juicio las entendederas de [Newton], de [Einstein]. Que no es cosa despreciable. Se supone que nada es capaz de viajar más rápido que la luz, el experimento consistió en enviar a través de la Tierra una panda de [Neutrinos], y después de comprobarlo unas 15.000 veces, llegaron a la conclusión de que efectivamente, hacían el recorrido pronto, 450 millas de recorrido, y por lo general muy rápidos los neutrinos en cuestión, tanto como unas 60 mil millonésimas de segundo más rápidos que la luz, en hacer ese camino. ¡¡Atención!! Puede ser muy importante, una pista, digo yo. Si el recorrido se inicia en Suiza, este hilo no nos puede conducir al ovillo de la huida de los euros?? Prometo desde aquí, seguir muy de cerca las correrías de estos bichos, a ver si la física nos saca del atolladero mercantil??
Bueno, la cosa es que de lo que tengo ganas de charrar es de la peli, por qué mira que se hizo larga la espera, por fin… ¡llegó! Luego lo de la calma otoñal, la velocidad del neutrino… aunque parezca desatinado, me sirve de recurso para decir que sí, creo que es una obra de arte. Claro, entiendo que es preciso olvidarse de las velocidades, de las comparaciones… únicamente relajarse en la butaca y que vaya pasando el tiempo. Vamos, como si viviéramos un otoño. Una cosina si es cierta, eché de menos aquellos descansos que se programaban antaño para hacer una visita al ambigú. Largo el film ehh… 141 minutos. Mi voto es… ¡Obra de Arte! Hay poesía en las imágenes, enamora. Ya lo sé, como todas las obras relevantes, con grupos y sentencias bien diferentes.
Y para lanzarme fuera, una semeya. Es de esa serie de recuerdos de un tiempo que no por pasado fue peor. Una imagen acercándose desde Pervera, el pueblo del mi siempre recordado abuelo, a El Empalme, camino de Aboño. Hay que ver como somos capaces de cambiar el rumbo de las cosas. Muchas, muchas veces dudo que sea para bien.
Qu'haya salú, y la suerte te acompañe.
Saludinos, J. Pablo
Saludinos, J. Pablo
No hay comentarios:
Publicar un comentario